martes, 1 de julio de 2014

Las cosas de la vida.

Después de un tiempo de desconexión creo que debo retomar mi vida con todo tipo de historias, hoy después de algún que otro altibajo, decido buscar todos los recuerdos buenos que he ido guardando en mi memoria a lo largo de mi vida. Está claro que no puedo escribirlos todos, pero algunos son muy singnificativos porque me recuerdan diferentes etapas de mi vida, y de todas, conseguí grandes aprendizajes. 

  • Reir sin parar en clase, hasta llorar sin control y que los profes nos llamaran una y otra vez la atención. Con la típica amenza "os separaré", sin recordar que gracias a nuestros apellidos seguiríamos juntas toda la etapa. 
  • Ir en mi viejo coche hasta el instituto cada día, sin radio, pero con unos geniales altavoces a pilas. Cantando y bailando siempre la misma canción. 
  • Salir de fiesta como "si no hubiera mañana", siendo conscientes que teníamos mucho que estudiar. 
  • Los bailes y canciones sin sentido que improvisábamos en clase, simplemente para pasarlo bien. 
  • Trabajar con los más pequeños y enseñarles cosas tan básicas como reir, jugar, bailar, cantar...sin obligarles a estar sentados en una silla. Sé que no debe ser muy profesional enseñarles a hacer la conga o simplemente correr por la escuela, pero me parecía mucho más enriquecedor para su aprendizaje. 
  • Los tartazos en las comidas familiares, no sé porqué en mi familia tenemos esa extraña manía, pero es realmente impresionante poder hacerlo.
  • Las fotos que la peque me pide hacerme con ella, con la única intención de taparme la cara, reir a mi costa, poner caras feas y pasar un buen rato. 
  • Las comidas con los compañeros de trabajo, hace poco que estamos juntos y cada día me siento más cómoda. 
  • Las carreras hasta la estación llegando casi sin aliento, pero juntas, ríendo y buscando alguna excusa para seguir riendo. 
  • Las conversaciones sin sentido que normalmente tenemos, esas que nos hacen reír sin parar. 
Tengo muchos más recuerdos felices, positivos y de los cuales no quiero olvidarme nunca. Pero hoy, me quedo con estos...a un día raro, malo, gris...si le pones buena energía, le pones empeño en recordar lo bueno, consigues sacarle una sonrisa realmente bonita. 

Porque ya está bien de escribir sobre penas, amores no correspondidos, amores ideales y tantas cosas que nos encanta imaginar. Teniendo tantas cosas buenas sobre las que escribir, y que además, son reales.