miércoles, 20 de noviembre de 2013

Ojalá pudiese odiarte, ojalá fuera más fácil olvidarte.

No es cierto que quiera odiarte, ni olvidarte...pero todo sería mucho más fácil si no te tuviera en mi cabeza, pero sobre todo en mi corazón. Y mira que me atreví a jurar y decir que nunca más me pasaría esto contigo, que siempre te odiaría...y ya ves, ni nunca ni siempre. Así es la vida. 

Hoy recuerdo la primera vez que te vi - o por lo menos, la primera vez que soy consciente de haberte visto- era verano, yo pasé entre tu amigo y tú, nos saludamos y ni siquiera me fijé en ti. A los pocos días, recibí una solicitud de amistad y un correo en el que te "presentabas". Esos días fueron diferentes. Me volviste a escribir dándome tu teléfono y dejándome una frase...que nunca he olvidado, ni eliminando todo lo que me recordaba a ti, he sido capaz de olvidarla. Ni odiándote hasta más no poder. Y ya ha pasado más de una década de todo esto.

Hace unos días me dijiste que no te odiara al día siguiente por no dejarme dormir lo sufuciente, y yo te contesté que no podía odiarte más. Y es cierto, lo he intentado, creía haberlo conseguido...pero no. Simplemente el orgullo pudo conmigo, y contigo. No sé qué es lo que te hizo escribirme otra vez, o porque te acordaste de mi. La excusa perfecta fue felicitarme por mi cumpleaños y creo que supiste elegir el día -aunque lo hicieras un día más tarde, disculpándote - imagino que en estos seis años, jamás se te olvidó mi cumpleaños, yo nunca he olvidado el tuyo. Ni tus gestos, ni tus miradas, ni nada tuyo. Ésto me recuerda que el otro día al leer un capítulo de un libro, no pude evitar pensar en ti. 


"-Debió amarla mucho para odiarla tanto...
-Y no pasa un solo día que no la recuerde. [...] Y sin embargo, ni siquiera hoy, tanto tiempo después, he llegado a odiarla lo suficiente."
 
 
A día de hoy, estoy convencida que serás mi amor para siempre, ese que recordaré cuando sea una vijecita, cuando me encuentre sola...serás ese amor que jamás tuve a mi lado. Y aunque a diferencia de mucha gente que le pasa esto mismo: yo no te tengo idealizado, soy realista, sé lo que sé de ti; aún así, me quedaría a tu lado.  Imagínate si es sincero esto que siento. 


 

No hay comentarios:

Publicar un comentario